Pienso que la educación debe
brindar
a todos, los medios de una ciudadanía consciente y activa, cuya plena
realización sólo puede lograrse en el contexto de sociedades democráticas.
Jonh Dewey, uno de los filósofos más representativo de
la educación norteamericana, pensaba que el individuo que se ha de educar es un individuo social y la sociedad es una
unión orgánica de individuos. Si para Dewey la educación adquiría un
tinte político, vemos como hoy día se da un creciente desafecto de los
ciudadanos por los asuntos de esta índole, lo cual amenaza a la solidaridad. El
ideal democrático no ha llegado a su mejor representación donde primen la
libertad, la paz, el pluralismo auténtico y la justicia social.
Se resalta la importancia de aprender haciendo, del
antiautoritarismo, la consideración de la educación como un hecho de naturaleza
política, la importancia de la integración escuela-comunidad, la autonomía y
democracia escolares, el papel de las actividades expresivas, constructivas y
colaborativas y el papel del maestro como dinamizador del proceso educativo.
Para Dewey era muy importante la llamada “ocupación”
como un modo de actividad de los niños paralela a algún trabajo que tiene lugar
en la vida social (cocina, costura, carpintería, granja, estudios
prehistóricos, excavaciones marítimas, geografía e historia, experimentos
científicos, clubs de debate). El programa de estudios debe organizarse para
que proporcione a los alumnos la oportunidad de dedicarse a actividades propias
de las situaciones efectivas de la vida. Vivir en una comunidad.
Hay que
preparar a cada persona para esa participación, enseñándole sus derechos y sus
deberes, pero también desarrollando sus competencias sociales y fomentando el
trabajo en equipo en la escuela.
El fracaso
escolar se ha convertido en generador de exclusión social. La política de educación debe
diversificarse suficientemente y concebirse de modo que no constituya un factor
adicional de exclusión. Cada vez más, los empleadores ya no exigen una
calificación determinada, unida todavía a la idea de pericia, y piden la
calificación mediante la formación técnica y profesional, el comportamiento
social, la aptitud para trabajar en equipo, la capacidad de iniciativa y la de asumir
riesgos.
La educación es fundamental para las reformas y el
progreso social. Nos encontramos continuamente reorganizando,
reconstruyendo y transformando el medio ambiente por lo que la educación es
permanente.
Mentalidad abierta, entusiasmo y responsabilidad,
con el fin de desarrollar un hábito reflexivo. Una comunidad de vida
cooperativa en la que uno sienta que participa y a la que contribuye. La tarea
no es sólo adiestrar individuos sino formar una vida social justa. El progreso
no radica en la sucesión de estudios sino en el desarrollo de nuevas actitudes.
No es una utopía, sí es motivación, esfuerzo y
disposición a realizar una verdadera y constructiva reforma de la educación,
que es la base de cualquier desarrollo.
A por ello !!!